
Acostúmbralo desde cachorro (si puedes)
Si lo bañas desde pequeño con suavidad y paciencia, será más fácil que lo vea como algo normal.

Usa agua tibia, ni caliente ni fría
La temperatura debe ser agradable al tacto. El agua muy fría o caliente puede asustarlo o incomodarlo.

Hazlo corto y positivo
Habla con voz tranquila, dale caricias y usa snacks al terminar. No lo alargues más de lo necesario.

Usa productos especiales para perros
Nada de shampoo humano. Elige uno suave, con buen aroma y pH neutro para su piel.

Evita mojarle los oídos y ojos directamente
Usa una taza o rociador suave para controlar el agua y proteger esas zonas sensibles.
Seca bien después del baño
Con toalla o secador (si lo tolera). Algunos perros odian el secador, así que acostúmbralo poco a poco con refuerzos positivos.

¿Y si tu perro odia el agua?
Usa champú seco en espuma sin aclarado.
Una opción rápida y menos estresante para ellos.
